29 de julio de 2007

Que nos hace ser diferentes......



Muchos gritan que somos tercermundistas
muchos afirman, que somos pobres
muchos dicen miles de frases
menospreciando un pueblo,
pero quienes un día llegaron
con el alma cargada de miedos
las manos vacías, y una maleta llena de sueños.
Hizo de esta Patria su propio hogar
dejando raíces muy hondas y autenticas.
Cuando se permanece lejano por un tiempo
se rememora la tierra de Bolívar, como le dicen ahora.
Pero esta tierra más de ser de alguien
es mía, es tuya, es de todos quienes nos sentimos venezolanos.
Seremos tercermundistas, pobres, incultos
y lo que se les venga en real gana decir.
Pero lo que jamás podrán afirmar,
es que no somos un pueblo cálido,
apacible, noble y lleno de esperanzas.
Veo el niño, con abdomen dilatado
descalzo, sucio de jugar en la tierra.
Pero Diosssssssssss esos ojos,
jamás se repiten en otro lado del mundo.
Esos ojos inmensos, brillantes, soñadores,
que gritan, al viento soy feliz.
Esa mirada que se extiende más allá de lo admisible
pues se vive con considerable escases, pero sabemos distinguir
la esencia de lo que podemos dejar para mañana
y lo que es inmediato y primordial.
Ese niño juega con cometas de papel, y se siente volar con ella.
Se siente dueño del espacio, del viento
y de los sueños de junto a ella elevarse.
Ese es el niño que me abraza
con la tierra que accidentalmente me vio nacer
y de la que me siento orgullosa de pertenecer.
Ese niño no tendrá una pelota, pero de una lata o envase
hace una pelota, y de una línea su arquería.
Ese niño de piel curtida por el polvo y por el sol
sabe del silencio y las miradas, y de quienes les miran con Amor.
Ese niño dice mil verdades, con la madurez de un adulto
la certeza de un letrado, y la inocencia del niño que es.
Ese niño que mas que ojos pareciera dos metras tener
negras, intensas, profundas, cuando te mira de frente
su amistad segura puedes tener.
Pues como la libertad del Águila, el sabe diferenciar
de quien le quiere, y Ama a quien le puede temer.
No conoce de peligros, pues juega en la calle
no conoce de miedos, pues trepa la mata para saborearse un mango.
sabe de punterías, pues afina el ojo en la tierra jugando metras.
Y como nadie, ondea el cuerpo, para bailar tambor.

Orgullosa de Ser Venezolana